LXVIII Aniversario del Primer Ayuntamiento de Apaseo el Alto
LXVIII Aniversario del Primer Ayuntamiento de Apaseo el Alto
1948 - 2016
“Los pueblos, como los individuos cuando alcanzan la mayoría de edad, tienen derecho a emanciparse”
Carlos Arteaga Saavedra
Por: Francisco Sauza
Cronista de Apaseo el Alto
El pasado 1 de enero de 2016, se cumplieron 68 años de la instalación del Primer Ayuntamiento Constitucional de Apaseo el Alto para el período 1948 - 1949, como resultado de una lucha en la que imperó la justicia y los legítimos intereses de un pueblo por alcanzar su soberanía y la autodeterminación.
Ésta lucha de los Apaseoaltenses, es el único acontecimiento en el Estado de Guanajuato que tuvo como resultado la creación de uno de sus municipios y para los Apaseoaltenses, es ejemplo de lucha por alcanzar la libertad, anhelo implícito en la naturaleza de los pueblos y seres humanos.
Una crónica contada por uno de los protagonistas (Tomada del libro “Memorias de mi pueblo” del Prof. Joaquín López Toledo.
“…Habiendo sido desconocido el Gobernador del Estado de Guanajuato Lic. Ernesto Hidalgo por el Congreso de la Unión, fue designado como Gobernador Interino, el Lic. Nicéforo Guerrero y posteriormente el Licenciado J. Jesús Castorena (1947) quien tenía varios años de radicar en la capital de la República, y quien venía libre de compromisos políticos hacia los grupos que habían dominado la política de Guanajuato, en los últimos años.
Con este acontecimiento, el anhelo de independencia y emancipación de nuestro pueblo, que anidaba en el corazón de todos sus habitantes, cobró nuevo impulso y esperanza.
Al presentarle al nuevo señor Gobernador los saludos, respetos y respaldos de todos los habitantes de esta comarca, la comisión encargada le `presentó un memorial con la petición sostenida por varias generaciones, de emancipación de nuestro pueblo, creando el nuevo municipio de Apaseo el Alto. El señor Gobernador se percató de la vehemencia de nuestra petición y del impulso de progreso de nuestro pueblo, cuyos habitantes habían luchado denodadamente por obtener el paso de la Carretera Panamericana, habiéndolo conseguido; y con su esfuerzo y unión, estaban logrando el crecimiento y mejoramiento de su pequeña ciudad.
Dentro de los funcionarios del gobierno del señor Licenciado J. Jesús Castorena, tuvimos muchos amigos que conocían nuestra ciudad, y quienes se encargaron de abonar ante el señor Gobernador, la justicia de nuestra causa.
Varias comisiones nuestra se encargaron con frecuencia, de entregar al señor gobernador, las informaciones y documentos que él solicitó, llegando el día en que manifestó a nuestros comisionados: “Estoy convencido de la justicia de su petición, y tengo la confianza y seguridad de que ustedes sabrán hacer progresarla nueva Municipalidad, y sostener la economía de su administración”.
Se acercaba el periodo de elecciones para Presidente y Ayuntamiento del Municipio de Apaseo (el Grande), al cual pertenecíamos, y se resolvió presentar un candidato de nuestro pueblo, siendo designado el señor Pedro Mendoza Esteves. En las elecciones anteriores de hacía dos años, habíamos presentado como candidato, a la Presidencia Municipal, al señor Carlos Arteaga Saavedra, pero como era de esperarse, los señores del otro Apaseo, se encargaron de hacerlo perder dentro de las elecciones internas del Partido Revolucionario. Recibimos un citatorio del señor Gobernador, para ocurrir a una audiencia cuya fecha se nos indicaba.
Los comisionados llegamos a la Capital del Estado, con toda oportunidad, y la mayoría prefirió esperar la hora de la cita, en el mismo Palacio de Gobierno.
En los patrios de la Planta baja, saludamos a algunos personajes de la Administración, y entre ellos, a unos de los ayudantes del señor Gobernador, quien nos expresó que el señor Gobernador estaba de nuestra parte; pro que entre los miembros de la Legislatura, circulaba la opinión, sugerida seguramente por personas del otro Apaseo, de que “de que de un municipio que más o menos se sostenía, se iban a hacer dos municipios pobres”, y que esta idea estaba influyendo en el ánimo del señor Gobernador.
Esta noticia cayó como agua fría en nuestro ánimo, amenguando nuestras esperanzas y entusiasmo y haciéndonos dudar de fuese aprobada la creación de nuestro nuevo municipio.
Cuando llegó el señor Vicente Mendoza Esteves, integrante de la comisión, le expresamos los temores de nuestro fracaso, y lo pusimos al corriente de las informaciones que habíamos recibido. Pero él, con el optimismo que lo caracterizaba, nos contestó: “No se desalienten; le hemos presentado al señor Gobernador, todas las pruebas de que nuestro municipio se podría sostener, y en esta audiencia, lucharemos con todos nuestros argumentos para que el señor Gobernador decida a favor de nuestro proyecto”.
En estos momentos penetró al Palacio, el señor David Zavala, Inspector de la Policía de la ciudad de León, sobrino del señor Gobernador y amigo nuestro, le informamos de la situación y él nos dijo a su vez, que no perdiéramos la esperanza. Y en seguida, subió al piso inmediato y entró a las Oficinas del señor Gobernador.
Faltando una hora para que se llegara el tiempo de nuestra cita, observamos gran actividad entre los miembros de la Cámara; algunos bajaban del piso superior, donde estaba instalada la Legislatura y entraban y salían de las oficinas del señor Gobernador.
Cuando fuimos llamados para ser recibidos por el Primer mandatario, el señor Gobernador nos recibió con amabilidad y nos informó que el Gobierno del Estado había unificado criterio y había sido aprobada la “creación del Nuevo Municipio de Apaseo el Alto”.
Después, supimos que el señor Gobernador estaba por aceptar el criterio negativo sustentando por miembros de la Cámara, pero llegó el señor David Silva Zavala, sobrino de él quien le dijo: “No, tío, los otros no son sus amigos; estos son los amigos los que no respaldan, y a ellos hay que favorecer”.
Unos días después, recibimos un citatorio del señor Diputado Don Octavio Ortega, para que una comisión de tres personas ocurriera a su domicilio en Celaya, ubicado en la calle de Guadalupe, a fin de complementar una disposición del señor Gobernador.
Nuestra Comisión integrada por el señor Don Vicente Mendoza Esteves, señor Don Pedro Mendoza Esteves y Joaquín López, estuvimos en la casa del señor Diputado, donde ya se encontraba la Comisión de Apaseo (El Grande), formada por los señores Alfonso Oliveros Rábago, José Estrella y señor Manríquez. Se nos informó que el propósito de la reunión era fijar los límites de los dos municipios, para así señalarlo en el Decreto respectivo.
La Comisión de Apaseo el Grande, propuso que la nueva municipalidad comprendiera exclusivamente lo que entonces formaba la jurisdicción del pueblo. En respuesta nuestra Comisión propuso que fuera la vía férrea la división de las dos municipalidades, a lo cual los señores de Apaseo el Grande, hicieron de postraciones de completo desacuerdo.
Intervino el señor Diputado Ortega, para serenar los ánimos y expresó que las indicaciones que habían recibido eran que se tomara en cuenta la influencia que cada cabecera tuviese sobre poblados en discusión.
Nuestra comisión hizo notar que poblados como San José, San Pedro Tenango y San Cristóbal habían expresado su disposición para pertenecer a nuestra nueva Municipalidad y habían dado su respaldo con firmas.
El señor Diputado explicó, que en imposibilidad de trazar geográficamente una línea divisoria, se trataba de ir señalando los poblados que integraran esa línea, dejando para más adelante, el señalamiento de una línea topográfica.
En esta forma, fueron señalados como límites de la nueva Municipalidad, los poblados de Canoas de arriba, La Presita, El Sabino, Marroquín, El Llanito y San Antonio Calichar. Como lugares más discutidos y solicitados por ambas partes, fueron San José Agua Azul y San Pedro Tenango, los cuales quedaron dentro de la Municipalidad de Apaseo el Grande.
Cumplido este requisito, la Legislatura de Estado emitió el Decreto respectivo, ordenando la creación del nuevo Municipio de Apaseo el Alto, con cabecera en nuestra ciudad.
Después de la larga y ardua lucha sostenida por varias generaciones, cristalizo la idea y anhelo de nuestros mayores, de lograr le Emancipación de nuestro pueblo, para hacerlo progresar, para mejorar sus condiciones de vida, de tranquilidad y de garantías para todas las familias y todos los habitantes.
PRIMER AYUNTAMIENTO Y PRIMER PRESIDENTE MUNICIPAL.
Las elecciones se realizaron el primer domingo de diciembre con candidatura única, y el primero de Enero de 1948, tomó posesión de su cargo como Presidente Municipal, el C. Pedro Mendoza Esteves, acompañado de su Ayuntamiento.
Este paso trascendental de nuestro pueblo, convirtiéndose en una nueva célula del organismo de nuestra nación, marcó el inicio de una nueva era en la vida de nuestra pequeña ciudad, proporcionándole personalidad jurídica por su Ayuntamiento, libertad y autonomía para poder desarrollarse en la medida del esfuerzo de sus habitantes.
El Ejido Apaseo el Alto acordó proporcionar su edificio de la calle 5 de Mayo para instalar las oficinas del municipio, dedicándose el C. Presidente Municipal, a dar al local una presentación decorosa y amueblar las oficinas. Se renovó la pintura de todas las paredes; se pudo cielo Salón de Cabildos; se repararon puertas y ventanas; se compraron muebles y se construyeron estantes. Todo el piso del edificio se pavimentó de mosaico, incluyendo el amplio patio.
Uno de los maestros que labra cantera en el templo en construcción, esculpió el primer escudo de armas de Apaseo el Alto, que fue fijado en la parte superior del edificio, sirviendo como base del Asta-Bandera del palacio Municipal.”
Primer Ayuntamiento de Apaseo el Alto, Guanajuato
Presidente: Pedro Mendoza Esteves
Síndico: Juan C. Tinajero Cervantes
Regidores:
Joaquín López Toledo
Antonio Serrano
Antonio Camacho Muñoz
Abraham Camacho Muñoz
Canuto García
Enrique Acevedo Centeno
Primer Ayuntamiento de Apaseo el Alto, Guanajuato 1948-1949
Arriba: José Leal Gómez (Secretario), Lic. Jesús Guerrero Esqueda, José Jiménez Arellano, Enrique Acevedo Centeno (Regidor), Antonio Camacho Muñoz (Regidor), J. Guadalupe Ríos (Regidor), Francisco Jiménez Arellano, Vicente Castillo Jiménez. Abajo: Leoncio García Alanís, Joaquín López Toledo (Regidor), Juan C. Tinajero Cervantes (Síndico), Pedro Mendoza Esteves (Presidente), Carlos Arteaga Saavedra (Síndico suplente) y Sabino Paredes Tapia.
1948 - 2016
“Los pueblos, como los individuos cuando alcanzan la mayoría de edad, tienen derecho a emanciparse”
Carlos Arteaga Saavedra
Por: Francisco Sauza
Cronista de Apaseo el Alto
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| Toma de protesta de Don Pedro Mendoza |
Ésta lucha de los Apaseoaltenses, es el único acontecimiento en el Estado de Guanajuato que tuvo como resultado la creación de uno de sus municipios y para los Apaseoaltenses, es ejemplo de lucha por alcanzar la libertad, anhelo implícito en la naturaleza de los pueblos y seres humanos.
Una crónica contada por uno de los protagonistas (Tomada del libro “Memorias de mi pueblo” del Prof. Joaquín López Toledo.
“…Habiendo sido desconocido el Gobernador del Estado de Guanajuato Lic. Ernesto Hidalgo por el Congreso de la Unión, fue designado como Gobernador Interino, el Lic. Nicéforo Guerrero y posteriormente el Licenciado J. Jesús Castorena (1947) quien tenía varios años de radicar en la capital de la República, y quien venía libre de compromisos políticos hacia los grupos que habían dominado la política de Guanajuato, en los últimos años.
Con este acontecimiento, el anhelo de independencia y emancipación de nuestro pueblo, que anidaba en el corazón de todos sus habitantes, cobró nuevo impulso y esperanza.
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| Intervención de Profr. Joaquín López Toledo |
Dentro de los funcionarios del gobierno del señor Licenciado J. Jesús Castorena, tuvimos muchos amigos que conocían nuestra ciudad, y quienes se encargaron de abonar ante el señor Gobernador, la justicia de nuestra causa.
Varias comisiones nuestra se encargaron con frecuencia, de entregar al señor gobernador, las informaciones y documentos que él solicitó, llegando el día en que manifestó a nuestros comisionados: “Estoy convencido de la justicia de su petición, y tengo la confianza y seguridad de que ustedes sabrán hacer progresarla nueva Municipalidad, y sostener la economía de su administración”.
Se acercaba el periodo de elecciones para Presidente y Ayuntamiento del Municipio de Apaseo (el Grande), al cual pertenecíamos, y se resolvió presentar un candidato de nuestro pueblo, siendo designado el señor Pedro Mendoza Esteves. En las elecciones anteriores de hacía dos años, habíamos presentado como candidato, a la Presidencia Municipal, al señor Carlos Arteaga Saavedra, pero como era de esperarse, los señores del otro Apaseo, se encargaron de hacerlo perder dentro de las elecciones internas del Partido Revolucionario. Recibimos un citatorio del señor Gobernador, para ocurrir a una audiencia cuya fecha se nos indicaba.
Los comisionados llegamos a la Capital del Estado, con toda oportunidad, y la mayoría prefirió esperar la hora de la cita, en el mismo Palacio de Gobierno.
En los patrios de la Planta baja, saludamos a algunos personajes de la Administración, y entre ellos, a unos de los ayudantes del señor Gobernador, quien nos expresó que el señor Gobernador estaba de nuestra parte; pro que entre los miembros de la Legislatura, circulaba la opinión, sugerida seguramente por personas del otro Apaseo, de que “de que de un municipio que más o menos se sostenía, se iban a hacer dos municipios pobres”, y que esta idea estaba influyendo en el ánimo del señor Gobernador.
Esta noticia cayó como agua fría en nuestro ánimo, amenguando nuestras esperanzas y entusiasmo y haciéndonos dudar de fuese aprobada la creación de nuestro nuevo municipio.
Cuando llegó el señor Vicente Mendoza Esteves, integrante de la comisión, le expresamos los temores de nuestro fracaso, y lo pusimos al corriente de las informaciones que habíamos recibido. Pero él, con el optimismo que lo caracterizaba, nos contestó: “No se desalienten; le hemos presentado al señor Gobernador, todas las pruebas de que nuestro municipio se podría sostener, y en esta audiencia, lucharemos con todos nuestros argumentos para que el señor Gobernador decida a favor de nuestro proyecto”.
En estos momentos penetró al Palacio, el señor David Zavala, Inspector de la Policía de la ciudad de León, sobrino del señor Gobernador y amigo nuestro, le informamos de la situación y él nos dijo a su vez, que no perdiéramos la esperanza. Y en seguida, subió al piso inmediato y entró a las Oficinas del señor Gobernador.
Faltando una hora para que se llegara el tiempo de nuestra cita, observamos gran actividad entre los miembros de la Cámara; algunos bajaban del piso superior, donde estaba instalada la Legislatura y entraban y salían de las oficinas del señor Gobernador.
Cuando fuimos llamados para ser recibidos por el Primer mandatario, el señor Gobernador nos recibió con amabilidad y nos informó que el Gobierno del Estado había unificado criterio y había sido aprobada la “creación del Nuevo Municipio de Apaseo el Alto”.
Después, supimos que el señor Gobernador estaba por aceptar el criterio negativo sustentando por miembros de la Cámara, pero llegó el señor David Silva Zavala, sobrino de él quien le dijo: “No, tío, los otros no son sus amigos; estos son los amigos los que no respaldan, y a ellos hay que favorecer”.
Unos días después, recibimos un citatorio del señor Diputado Don Octavio Ortega, para que una comisión de tres personas ocurriera a su domicilio en Celaya, ubicado en la calle de Guadalupe, a fin de complementar una disposición del señor Gobernador.
Nuestra Comisión integrada por el señor Don Vicente Mendoza Esteves, señor Don Pedro Mendoza Esteves y Joaquín López, estuvimos en la casa del señor Diputado, donde ya se encontraba la Comisión de Apaseo (El Grande), formada por los señores Alfonso Oliveros Rábago, José Estrella y señor Manríquez. Se nos informó que el propósito de la reunión era fijar los límites de los dos municipios, para así señalarlo en el Decreto respectivo.
La Comisión de Apaseo el Grande, propuso que la nueva municipalidad comprendiera exclusivamente lo que entonces formaba la jurisdicción del pueblo. En respuesta nuestra Comisión propuso que fuera la vía férrea la división de las dos municipalidades, a lo cual los señores de Apaseo el Grande, hicieron de postraciones de completo desacuerdo.
Intervino el señor Diputado Ortega, para serenar los ánimos y expresó que las indicaciones que habían recibido eran que se tomara en cuenta la influencia que cada cabecera tuviese sobre poblados en discusión.
Nuestra comisión hizo notar que poblados como San José, San Pedro Tenango y San Cristóbal habían expresado su disposición para pertenecer a nuestra nueva Municipalidad y habían dado su respaldo con firmas.
El señor Diputado explicó, que en imposibilidad de trazar geográficamente una línea divisoria, se trataba de ir señalando los poblados que integraran esa línea, dejando para más adelante, el señalamiento de una línea topográfica.
En esta forma, fueron señalados como límites de la nueva Municipalidad, los poblados de Canoas de arriba, La Presita, El Sabino, Marroquín, El Llanito y San Antonio Calichar. Como lugares más discutidos y solicitados por ambas partes, fueron San José Agua Azul y San Pedro Tenango, los cuales quedaron dentro de la Municipalidad de Apaseo el Grande.
Cumplido este requisito, la Legislatura de Estado emitió el Decreto respectivo, ordenando la creación del nuevo Municipio de Apaseo el Alto, con cabecera en nuestra ciudad.
Después de la larga y ardua lucha sostenida por varias generaciones, cristalizo la idea y anhelo de nuestros mayores, de lograr le Emancipación de nuestro pueblo, para hacerlo progresar, para mejorar sus condiciones de vida, de tranquilidad y de garantías para todas las familias y todos los habitantes.
PRIMER AYUNTAMIENTO Y PRIMER PRESIDENTE MUNICIPAL.
Las elecciones se realizaron el primer domingo de diciembre con candidatura única, y el primero de Enero de 1948, tomó posesión de su cargo como Presidente Municipal, el C. Pedro Mendoza Esteves, acompañado de su Ayuntamiento.
Este paso trascendental de nuestro pueblo, convirtiéndose en una nueva célula del organismo de nuestra nación, marcó el inicio de una nueva era en la vida de nuestra pequeña ciudad, proporcionándole personalidad jurídica por su Ayuntamiento, libertad y autonomía para poder desarrollarse en la medida del esfuerzo de sus habitantes.
El Ejido Apaseo el Alto acordó proporcionar su edificio de la calle 5 de Mayo para instalar las oficinas del municipio, dedicándose el C. Presidente Municipal, a dar al local una presentación decorosa y amueblar las oficinas. Se renovó la pintura de todas las paredes; se pudo cielo Salón de Cabildos; se repararon puertas y ventanas; se compraron muebles y se construyeron estantes. Todo el piso del edificio se pavimentó de mosaico, incluyendo el amplio patio.
Uno de los maestros que labra cantera en el templo en construcción, esculpió el primer escudo de armas de Apaseo el Alto, que fue fijado en la parte superior del edificio, sirviendo como base del Asta-Bandera del palacio Municipal.”
Primer Ayuntamiento de Apaseo el Alto, Guanajuato
Presidente: Pedro Mendoza Esteves
Síndico: Juan C. Tinajero Cervantes
Regidores:
Joaquín López Toledo
Antonio Serrano
Antonio Camacho Muñoz
Abraham Camacho Muñoz
Canuto García
Enrique Acevedo Centeno
Primer Ayuntamiento de Apaseo el Alto, Guanajuato 1948-1949
Arriba: José Leal Gómez (Secretario), Lic. Jesús Guerrero Esqueda, José Jiménez Arellano, Enrique Acevedo Centeno (Regidor), Antonio Camacho Muñoz (Regidor), J. Guadalupe Ríos (Regidor), Francisco Jiménez Arellano, Vicente Castillo Jiménez. Abajo: Leoncio García Alanís, Joaquín López Toledo (Regidor), Juan C. Tinajero Cervantes (Síndico), Pedro Mendoza Esteves (Presidente), Carlos Arteaga Saavedra (Síndico suplente) y Sabino Paredes Tapia.
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